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San Miguel tuvo un origen monástico, posiblemente en el S.XII. Los avatares de los siglos la han convertido en una simple capilla parroquial. En1964 se la declara monumento histórico, hecho que culminó en una buena reparación.

La torre es de un solo cuerpo rectangular, de eje en sentido contrario al de la nave principal y abierto por sus cuatro lados. Las aberturas del norte y sur son sencillas. En cambio, las geminadas del este y oeste son más elegantes.

Es templo de una sola nave y su estructura está impuesta por la torre que apoya en dos poderosas pilastras. Ambas dividen la nave en dos tramos. Cada pilastra posee una columna adosada en la que apea un arco de medio punto que sostiene el muro que se eleva hasta el techo para prestar soporte a la bóveda transversal esquifada existente bajo la torre. Los capiteles de estas columnas presentan animales agarrándose por las patas y el de la derecha,"dos hojas lanceoladas que acaban en cabeza humana" (Imagen 7)

El exterior del ábside pone de manifiesto en la ornamentación de los capiteles y canecillos la unidad del monumento. En los capiteles de las columnas la hojas se prolongan hacia el exterior dando la vuelta en el vacío hasta alcanzar el collarino, logrando un hueco muy bello por la esbeltez y ligereza que le imprime.

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La portada a modo de arco triunfal está precedido de un triple arco, del que sólo el central apoya sobre columnas, El capitel de la izquierda llama poderosamente la atención por el vacío que dejan las hojas al volverse al exterior para apoyarse en el collarino. Otro arco semejante al triunfal une presbiterio con ábside (Imagen 7). En la bóveda de cascarón han descubierto pinturas, de fecha muy posterior a la edificación del templo - S XV-XVI- (Imagen 8).

En el muro sur entre dos arcos ciegos existe un ajimez cuyos arquitos de herradura acreditan una época anterior a la capilla (Imagen 9). A la misma época debe pertenecer una pequeña pila (¿de abluciones?) situada junto a la puerta norte y próxima a otra bautismal que se halla a los pies del templo bajo el coro de madera (Imagen 10).

A primera vista causa una impresión agradable. Se encuentra exenta y fácilmente se advierten los tres elementos que la configuran: un tramo rectangular, en cuyo extremo este se eleva la torre; sigue el ábside más bajo y en el oeste la fachada con frontón que se eleva un poco sobre la altura de la nave (Imagen 1).

De las dos puertas que posee, es la del lado norte la que acapara nuestra atención por la finura y delicadeza en el detalle. Tiene dos arquivoltas cubiertas por un guardapolvos ajedrezado. La arquivolta exterior desciende hasta un poco más abajo que los capiteles del arco interior y está formada por doce dovelas decoradas con sendas rosetas del mismo tipo, pero todas diferentes. Parece que el maestro tenía un gran gusto por esta pieza ornamental que hallaremos tanto en el exterior como en el interior del templo. En la clave del arco, un Agnus Dei con la cruz sobre la espalda y con la pata delantera derecha en actitud de sostener la cruz. Posee rasgos muy rudimentarios (Imagen 3).

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La arquivolta interior es muy original. Es un toro con estrías envolventes decoradas con numerosas bolitas pequeñas. Dicho toro apea en dos columnas con capiteles. En el de la izquierda vemos lo típico del maestro de Eiré: diminutas cabezas humanas vueltas hacia arriba dentro de una ancha hoja lanceolada. En el derecho, repite las hojas e introduce motivos florales (Imagen 4).

El tímpano sólo conserva la parte superior. La inferior ha sido sustituida y presenta dibujos de círculos enlazados formando cruces. Dos mochetas sostienen el tímpano. Personalmente, estas mochetas y los capiteles huecos del ábside y del interior, son lo que más me impactaron en la visita y acuden a mi memoria, siempre que pienso en San Miguel. La mocheta derecha nos muestra dos bestias encaramadas que acaban en cabezas humanas vueltas en sentido contrario al cuerpo (Imagen 6) y en la parte superior se lee: LUMA. La interpretación podría ser: Lucas, Magíster (El maestro Lucas). En la mocheta izquierda una cabeza humana hacia abajo en la unión de las dos hojas lanceoladas Imagen 5) . Estos rostros de Eiré son fruto de una inteligencia fina que presenta la belleza en líneas tenues apenas perceptibles y que demuestran el dominio de los instrumentos de la confección.

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Unos años después de que Carmen visitase el templo lo hice yo. Fue el 8 de agosto de 2011. Fui pensando en visitar algún templo más de la Ribeira Sacra pero toda la mañana se me fue como un suspiro disfrutando de este templo "diferente". Recorrer un templo y fijar sus detalles lleva tiempo y paciencia a partes iguales. Así es como empiezan a aparecer ante ti detalles que han pasado inadvertidos. Por ejemplo: la mocheta a nuestra derecha de la portada principal es referida en los textos consultados como dos animales alados bajo unas siglas que pueden referirse a "Lucas Magister". Efectivamente hay "LU" y "MA" bajo tildes que indican abreviatura; pero un par de pequeños detalles hacen que cambie completamente el mensaje de la piedra. Primero: el animal alado con cara de hombre bajo las letras "LU", lleva cuernos y sus patas son pezuñas. Segundo el semejante al anterior bajo las letras "MA", lleva garras y un flequillo que puede valer por melena. La conclusión es evidente. Son, toscamente labrados, los símbolos de dos de los Vivientes del Tetramorfos: Lucas y Marcos, evangelistas significados con el toro y el león.

Surge la duda de por qué solo dos evangelistas. ¿Que pasa con Mateo y Juan?. ¿Acaso el artífice del templo hizo un sesgo para obviarlos y situandose "al revés del mundo" siguió la doctrina evangélica de solo estos dos esculpidos?. "Al revés del mundo". Llevando la contraria. A contracorriente. Cabeza abajo.. todas estas expresiones cuadran para significar cómo labra las cabecitas humanas el maestro de Eiré (Imágenes 14, 15 y 17).

La dovela que porta el Agnus Dei posee epigrafía. Tres letras "AGN" con tilde sobre ellas, definiendo lo que vemos (Imagen 16).

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El tímpano está ocupado por un dintel alargado apeado en las mochetas y sobre él, llenando la porción superior tres piezas más claras. El motivo que aparece en todas ellas es el mismo. Es el símbolo que se conoce como "lazo irlandés" y que en el dintel aparece decorando seis círculos secantes. Arriba, cada uno de los bloques de caliza lucen asimismo un lazo cada uno de ellos. Es evidente que el "Maestro de Eiré" asume ese lazo como signo de identidad, y lo refuerza, signando un capitel del interior con el mismo, rompiendo por completo con la decoración de su cesta. Este "logo" y las cabecitas boca abajo, "a contracorriente" parecen ser su forma de significarse.

La mocheta situada a nuestra izquierda, esculpida también con gran finura en caliza clara, en contra de lo usual en Galicia que es trabajar el granito, muestra una cabecita boca abajo situada bajo dos volutas. Es una cabeza barbada con la mano izquierda sujetando o mesando la barba. Las volutas lucen vegetación esquemática en los laterales y de la cabeza del personaje surgen dos ramas a modo de cuernos que evocan al personaje mítico de la literatura celta Cernunnos.

Lo cierto es que van siendo ya varios guiños seguidos a los influjos celtas en un templo situado en un pueblo cuyo nombre quiere decir "Irlanda".

No puedo pasar de largo esta reflexión sin recordar que en Biota, en un templo asimismo dedicado a san Miguel y en esa misma situación hay también un anciano barbado con tallante al hombro, quizá el "Maestro" y que ese templo se ha puesto en relación a través de una epigrafía que yo descubrí allí, con el mundo gaélico.